Phone Booth In Heaven - Jim White

Oh where are we going?

Oh where have we been?

Our hush-a-bye angel,

she’s safe and tucked in. I drive around town, while

You sit and watch the rain.

There’s what you think with your heart and what I

feel with my brain.

For those who plant

Nothing but the seeds of the falling there is a phone booth in heaven that no

one is calling.

It sits on a highway that

Leads nowhere.

I’ll drop you a line next time I find myself there.

Remembering them days, how we wore our weakness well

There’s some say that heaven can’t exist without hell, well if the proof’s in

the pudding, and that axiom’s true, somehow

The heart of the matter escaped me and you.

For those who plant nothing but the

seeds of the falling there is a phone

Booth in heaven that no one is calling.

Though the ghosts of redemption might

whisper odd promises, I for one don’t put

Much faith in them specters.

Now the blueprint for sorrow is just to put off

the hurt 'til the price of tomorrow becomes

More than love’s worth.

'Til what’s begged and what’s stole is just the hollow

remains of some beautiful failure that we

Cling to in vain.

For those who plant nothing but the seeds of the falling

there is a phone booth in heaven that no one is

Calling.

The truest word heard there is the word that’s unspoken 'cause you

can’t mend what the Good Lord designed to be

Broken.

Oh where are we going?

My darling oh where?

Our sweetheart’s in

dreamland, please let her stay there.

We are two

Separate people, with two separate ways.

Until we come to our senses,

it’s our sweetheart that pays

¿Adónde vamos?

Oh, ¿dónde hemos estado?

Nuestro ángel de silencio,

ella está segura y arropada. Conduzco por la ciudad, mientras

Te sientas y miras la lluvia.

Está lo que piensas con el corazón y lo que yo

sentir con mi cerebro.

Para los que plantan

Nada más que las semillas de la caída hay una cabina telefónica en el cielo que no

uno está llamando.

Se encuentra en una carretera que

No lleva a ninguna parte.

Te enviaré una línea la próxima vez que me encuentre allí.

Recordando esos días, como bien llevamos nuestra debilidad

Hay algunos que dicen que el cielo no puede existir sin el infierno, bueno, si la prueba está en

el pudín, y ese axioma es cierto, de alguna manera

El meollo del asunto se nos escapó a mí y a ti.

Para aquellos que plantan nada más que el

semillas de la caída hay un teléfono

Cabina en el cielo que nadie está llamando.

Aunque los fantasmas de la redención podrían

susurro extrañas promesas, yo por mi parte no pongo

Mucha fe en esos espectros.

Ahora el plan para el dolor es solo posponer

el dolor hasta que el precio del mañana se convierta

Más que el valor del amor.

Hasta que lo que se ruega y lo que se robó es solo el hueco

restos de algún hermoso fracaso que

Aferrarse en vano.

Para aquellos que plantan nada más que las semillas de la caída

hay una cabina telefónica en el cielo que nadie está

Vocación.

La palabra más verdadera que se escucha allí es la palabra que no se dice porque tú

no puede reparar lo que el Buen Dios diseñó para ser

Roto.

¿Adónde vamos?

Cariño, oh, ¿dónde?

Nuestro amor está en

país de los sueños, por favor déjala quedarse allí.

Nosotros somos dos

Personas separadas, con dos caminos separados.

Hasta que volvamos a nuestros sentidos,

es nuestro amor el que paga