Стать песней - Алиса

Я сижу на кухне в углу, сердце бередит голова и рука вскрывает струной двери.

Ритмом наполняется пульс, кровь перетекает в слова, а в груди звенят бубенцы —

верь им!

Припев:

Мимо огней чьих-то побед, между тисков лести,

Я прохожу сквозь пустоцвет и становлюсь песней.

Лысая резина дорог, дальний свет движения вспять и летят огни деревень в

прочерк.

Снова утекаю в закат, звездами рассветы менять, видимо, такой у меня почерк.

Припев:

Мимо огней чьих-то побед, между тисков лести,

Я прохожу сквозь пустоцвет и становлюсь песней.

Фаера движением вверх!

Радостью пульсирует зал!

Мы, словно искры огня, вместе!

Только оставаться живым, фальшью не ослабить накал,

И уйти к началу начал Песней!

Припев:

Мимо огней чьих-то побед, между тисков лести,

Я прохожу сквозь пустоцвет и становлюсь песней.

Мимо огней чьих-то побед, между тисков лести,

Я прохожу сквозь пустоцвет и становлюсь песней.

Estoy sentado en la esquina de la cocina, mi cabeza da vueltas en mi corazón y mi mano abre la puerta con una cuerda.

El pulso se llena de ritmo, la sangre fluye en palabras y suenan campanas en el pecho.

¡créelos!

Coro:

Más allá de los fuegos de las victorias de alguien, entre las garras de la adulación,

Atravieso la flor vacía y me convierto en un canto.

Los neumáticos calvos de los caminos, la luz lejana de la inversión y las luces de los pueblos vuelan en

pizca.

Estoy fluyendo hacia la puesta de sol otra vez, cambiando los amaneceres con estrellas, aparentemente, esta es mi letra.

Coro:

Más allá de los fuegos de las victorias de alguien, entre las garras de la adulación,

Atravieso la flor vacía y me convierto en un canto.

¡Faera sube!

¡La sala vibra de alegría!

¡Somos como chispas de fuego, juntos!

Solo mantente vivo, no debilites el calor con falsedad,

¡Y ve al principio de la Canción!

Coro:

Más allá de los fuegos de las victorias de alguien, entre las garras de la adulación,

Atravieso la flor vacía y me convierto en un canto.

Más allá de los fuegos de las victorias de alguien, entre las garras de la adulación,

Atravieso la flor vacía y me convierto en un canto.