Revenant - Lantern

«A question unto thee: what suffering made you linger?»

You show me Italy in late sixties, winter’s time

Catholic belief still struck so deep in your fingers

The priests flogged and conveyed against their thighs, moaning…

Should you attempt to shun and avoid the light, sadism stormed in

Abused, and dry you bled, your dreams in death stayed spawning

Wrath upon the Lord: the son and ghost your lust sees bleed

«Befoul the sabbath of light!»

Force them brightness the way you were forced

Force them the visions you suffered in death;

the timelessness since

Expel their god out from your flesh for demons to witness how

The revenant prays at his church

Sleepless one… Your corpse will house your wandering spirit

When the moon… Is waning gibbous, your remnant’s they shall dig:

Sunday dawn… A foul wind will clatter

The bones lay hidden within the church soil

Evil spirits turned away for centuries shall again be embraced

To host the cellars, crawl the estates

Join the risen for a sabbath of underworld

«Something's rotten…» the parish may say:

A morbid stench… The draught from cellars swiftly conveys

'cross the halls… The light in the tunnel of darkness shall shed

To divulge the dead spread out at sacrament

…Befoul the sabbath

Falls a sea of light

This space and time

Absorbed by the laws of the other side;

Commence the christenings to the coven of revenant

The wafer and the wine, feces divine, poison healing

Reversed christenings — atone the sins by dying

Confessions of the flesh, intestines and fresh blood

Take one last goodly grasp through the icon glass —

The light will take you to god

Sheep of god… The light will take you

Sheep of god… The light will take you

Where you’re dreaming yet your soul’s awake

For endless nightmares to feed

Yearning, grief, hatred, true inner darkness

Shall be yours eternally

May your flesh, mind and soul linger for eternities

«Befoul the sabbath of light!»

«Una pregunta para ti: ¿qué sufrimiento te hizo demorar?»

Muéstrame Italia a finales de los sesenta, tiempo de invierno

La creencia católica todavía golpea tan profundamente en tus dedos

Los sacerdotes azotados y transportados contra sus muslos, gimiendo...

Si intentas rehuir y evitar la luz, el sadismo irrumpirá en ti.

Abusado, y seco, sangraste, tus sueños en la muerte se mantuvieron engendrando

Ira sobre el Señor: el hijo y el fantasma que tu lujuria ve sangrar

«¡Antes del sábado de la luz!»

Oblígalos a brillar de la forma en que fuiste forzado

Oblígales las visiones que sufriste en la muerte;

la atemporalidad desde

Expulsa a su dios de tu carne para que los demonios sean testigos de cómo

El renacido reza en su iglesia

Insomne… Tu cadáver albergará tu espíritu errante

Cuando la luna... Es gibosa menguante, de tus remanentes cavarán:

Amanecer de domingo... Un viento hediondo azotará

Los huesos yacían escondidos dentro del suelo de la iglesia.

Los espíritus malignos rechazados durante siglos serán nuevamente abrazados

Para albergar las bodegas, rastrear las fincas

Únete a los resucitados para un sábado del inframundo

«Algo está podrido…» puede decir la parroquia:

Un hedor mórbido... La corriente de aire de los sótanos transmite rápidamente

'cruzar los pasillos... La luz en el túnel de la oscuridad arrojará

Para divulgar los muertos esparcidos en el sacramento

…antes del día de reposo

Cae un mar de luz

Este espacio y tiempo

Absorbido por las leyes del otro lado;

Comienzan los bautizos del aquelarre de revenant

La hostia y el vino, heces divinas, veneno curativo

Bautizos invertidos: expiar los pecados al morir

Confesiones de la carne, los intestinos y la sangre fresca

Tome una última buena mano a través del icono de cristal:

La luz te llevará a dios

Ovejas de dios… La luz os llevará

Ovejas de dios… La luz os llevará

Donde estás soñando pero tu alma está despierta

Para pesadillas interminables que alimentar

Anhelo, pena, odio, verdadera oscuridad interior.

Será tuyo eternamente

Que tu carne, mente y alma perduren por las eternidades

«¡Antes del sábado de la luz!»