The State Vs. Thomas Light - The Protomen

Emily, the crowd has gathered here

But it is not because of you

Emily, the taste of blood in their mouths

I can’t imagine what they’ll do

But it doesn’t matter what they’ll do to me

Emily, they’ve forgotten you

When they set their sights on me

They will hang me from the rope tonight

Will you be waiting there for me?

Will our souls remember where we said we’d meet

On the way out of this town?

I’m leaving one way or the other, Emily

There’s nothing left here for me now

Emily, it’s so quiet now

It’s like the calm before a storm

They will punish me for what he did to you

But either way it’s all my fault

Cause I made the man who laid his hands on you

And I would tear him down, but I feel like a dead man

And what can a dead man do?

(This is not your fault)

I’m leaving one way or the other, Emily

(This is not your fault)

There’s nothing left here for me now

Turning his attention to the proceedings…

Here comes the blow

We find the only man who loved her

We find the only man who’d give his life to see her once again

We find this man-

(Not) Guilty…

I am (Not) guilty…

I am (Not) guilty!

The judge entered his chambers.

The lawyers and jury filed out of the courtroom,

leaving Light, a free man, sitting silently behind the defendant’s table.

The sound of the mob outside was deafening.

Even from within the thickly

marbled walls of the courthouse, their rage — their sense of injustice — were

palpable.

Throughout the trial, the telescreen had told them that their

judicial system would ultimately fail them, that the laws of the city were

flawed, skewed to shelter monsters like Light, powerless to protect the people.

Impotent.

Weak.

Dangerously out of touch with the times.

Obviously,

the screen had been telling the truth.

Now, it was telling the masses that

they would have to take matters into their own hands if justice was to be

served

Emily, la multitud se ha reunido aquí.

Pero no es por tu culpa

Emily, el sabor de la sangre en sus bocas

No puedo imaginar lo que harán.

Pero no importa lo que me hagan

Emily, te han olvidado

Cuando pusieron sus ojos en mí

Me colgarán de la cuerda esta noche

¿Me estarás esperando allí?

¿Recordarán nuestras almas dónde dijimos que nos encontraríamos?

¿Al salir de esta ciudad?

Me voy de una forma u otra, Emily

No queda nada aquí para mí ahora

Emily, está tan tranquilo ahora

Es como la calma antes de una tormenta

Me van a castigar por lo que te hizo

Pero de cualquier manera es todo mi culpa

Porque yo hice al hombre que puso sus manos sobre ti

Y lo derribaría, pero me siento como un hombre muerto

¿Y qué puede hacer un hombre muerto?

(Esto no es tu culpa)

Me voy de una forma u otra, Emily

(Esto no es tu culpa)

No queda nada aquí para mí ahora

Volviendo su atención a los procedimientos...

Aquí viene el golpe

Encontramos al único hombre que la amaba

Encontramos al único hombre que daría su vida por volver a verla

Encontramos a este hombre-

(No culpable…

No soy culpable…

¡No soy culpable!

El juez entró en su despacho.

Los abogados y el jurado salieron de la sala del tribunal,

dejando a Light, un hombre libre, sentado en silencio detrás de la mesa del acusado.

El sonido de la multitud afuera era ensordecedor.

Incluso desde dentro de la espesa

paredes de mrmol del palacio de justicia, su rabia, su sentido de la injusticia, eran

palpable.

A lo largo del juicio, la telepantalla les había dicho que sus

sistema judicial finalmente les fallaría, que las leyes de la ciudad eran

defectuoso, sesgado para albergar monstruos como Light, impotente para proteger a la gente.

Impotente.

Débil.

Peligrosamente fuera de contacto con los tiempos.

Obviamente,

la pantalla había estado diciendo la verdad.

Ahora, le estaba diciendo a las masas que

tendrían que tomar el asunto en sus propias manos si se iba a hacer justicia

servido