Coldest Winter In Memory - Al Stewart

The coldest winter in memory was 1709

The sea froze off the coast of France all along the Neptune line

By the lost town of Dunwich the shore was washed away

They say you hear the church bells still as they toll beneath the waves

Come all you earthly princes, wheresoever you may be From the Sun King in the court of France to the Czar in Muscovy

Take heed of Charles of Sweden, the Lion of the North,

On the cracked earth of summer with his army he goes forth

Guardian angels wherever you may be,

reach down and keep my soul for me I was there amongst that number, I heard the trumpets strain

I saw the host of banners spread across the Polish plain

Those who stood against us, they soon were swept away

They may have the numbers but it’s Charles shall have the day

We cut our way through forests, crossed on frozen streams

They fell away before us like a murmur in a dream

And they burned the land around us as snow was closing in And the arms of winter took us as we fired against the wind

Guardian angels wherever you may be,

reach down and keep my soul for me Through all the courts of Europe there’s a rumor from the East

The kings have come to battle and it’s Charles who’s known defeat

They’ll shake their heads and wonder at how this came to be But it’s nights without a shelter that have made an end for me Now Charles is fled to Turkey, left his men afar

And they’ll be marched through Moscow now as prisoners of the Czar

And had I but known last summer what I know understand

I’d have never set my foot inside this bleak and bitter land

Guardian angels wherever you may be,

reach down and keep my soul for me The coldest winter in memory was 1709

The sea froze off the coast of France all along the Neptune line

By the lost town of Dunwich the shore was washed away

They say you hear the church bells still as they toll beneath the waves

El invierno más frío que se recuerda fue el de 1709

El mar se congeló frente a la costa de Francia a lo largo de la línea de Neptuno

Por la ciudad perdida de Dunwich la costa fue arrastrada

Dicen que todavía escuchas las campanas de la iglesia mientras doblan bajo las olas

Venid todos vosotros príncipes terrenales, dondequiera que estéis Desde el Rey Sol en la corte de Francia hasta el Zar en Moscovia

Cuidaos de Carlos de Suecia, el León del Norte,

Sobre la tierra agrietada del verano con su ejército avanza

Ángeles guardianes dondequiera que estéis,

agáchate y mantén mi alma para mí Yo estaba allí entre ese número, escuché el sonido de las trompetas

Vi la multitud de pancartas esparcidas por la llanura polaca

Aquellos que se opusieron a nosotros, pronto fueron barridos

Puede que tengan los números, pero es Charles quien tendrá el día.

Nos abrimos paso a través de bosques, cruzamos arroyos congelados

Cayeron ante nosotros como un murmullo en un sueño

Y quemaron la tierra a nuestro alrededor mientras la nieve se cerraba Y los brazos del invierno nos tomaron mientras disparábamos contra el viento

Ángeles guardianes dondequiera que estéis,

agáchate y mantén mi alma para mí A través de todas las cortes de Europa hay un rumor del Este

Los reyes han venido a la batalla y es Carlos quien ha conocido la derrota.

Sacudirán la cabeza y se preguntarán cómo sucedió esto, pero son las noches sin refugio las que me han acabado. Ahora Charles huyó a Turquía, dejó a sus hombres lejos.

Y ahora marcharán por Moscú como prisioneros del Zar

Y si hubiera sabido el verano pasado lo que sé entender

Nunca hubiera puesto mi pie dentro de esta tierra desolada y amarga

Ángeles guardianes dondequiera que estéis,

agáchate y mantén mi alma para mí El invierno más frío en la memoria fue 1709

El mar se congeló frente a la costa de Francia a lo largo de la línea de Neptuno

Por la ciudad perdida de Dunwich la costa fue arrastrada

Dicen que todavía escuchas las campanas de la iglesia mientras doblan bajo las olas