The Little Lady Preacher - Tom T. Hall

Oh, the little lady preacher from the limestone church

Ill never forget her, I guess

She preached each sunday mornin on the local radio

With a big black Bible and a snow-white dress

She was 19 years of age and was developed to a fault

But I will admit she knew the Bible well

A little white lace hanky marked the text that she would use

Shed breathe into that microphone and send us all to hell

She had a guitar picker by the name of luther short

A hairy-legged soul lost out in sin

She would turn and smile at luther when the program would commence

With a voice as sweet as angels she would break out in a hymn

I was pickin for her too with what we call the doghouse bass

I clung to every word that passed her lips

She was down on booze and cigarettes and high on days to come

And shed punctuate the prophecy with movements of her hips

The lord knows how I loved her, he was there each time she preached

But ol luther took her home each sunday morn

Lookin back I still recall the way it hurt my tender pride

I longed to be a hero but theyre made not born

Sometimes ol luther showed up at the studio half-tight

And smokin was a thing he liked to do She never said a word to him but said a prayer for me I told her in a way that Id been prayin for her too

One sunday her old man showed up and said that she was gone

Said she and brother luther had a call

I can see me standin in that studio that day

I had to face the heartbreak, unemployment and all

I dont know where they are cause I aint seen them people since

Lord if I judge em let me give em lots o room

I know ol luther short and hes a hard ol boy to change

And Ive often sat and wondered who it was converted whom

Oh, la pequeña dama predicadora de la iglesia de piedra caliza

Nunca la olvidaré, supongo.

Predicó todos los domingos por la mañana en la radio local

con una gran biblia negra y un vestido blanco como la nieve

Tenía 19 años de edad y estaba desarrollada hasta el punto de fallar.

Pero admito que conocía bien la Biblia.

Un pequeño pañuelo de encaje blanco marcaba el texto que usaría

Respiraría en ese micrófono y nos enviaría a todos al infierno

Ella tenía un guitarrista llamado Luther Short

Un alma de piernas peludas perdida en el pecado

Se giraba y le sonreía a Luther cuando comenzaba el programa.

Con una voz tan dulce como la de los ángeles, ella estallaría en un himno

Yo también estaba eligiendo para ella con lo que llamamos el bajo de la caseta del perro

Me aferré a cada palabra que pasaba por sus labios

Estaba baja de alcohol y cigarrillos y alta en los días venideros

Y puntuaría la profecía con movimientos de sus caderas

El señor sabe cuánto la amaba, él estaba allí cada vez que ella predicaba

Pero ol luther la llevó a casa todos los domingos por la mañana

Mirando hacia atrás, todavía recuerdo la forma en que hirió mi tierno orgullo

Anhelaba ser un héroe, pero no nacieron

A veces, el viejo Luther aparecía en el estudio medio apretado

Y fumar era algo que le gustaba hacer. Ella nunca le dijo una palabra, pero dijo una oración por mí. Le dije de alguna manera que yo también había estado orando por ella.

Un domingo apareció su viejo y dijo que se había ido

Dijo que ella y el hermano lutero tenían una llamada

Puedo verme de pie en ese estudio ese día

Tuve que enfrentar la angustia, el desempleo y todo

No sé dónde están porque no los he visto personas desde

Señor, si los juzgo, déjame darles mucho espacio

Conozco al viejo luther bajo y es un chico difícil de cambiar

Y a menudo me he sentado y me he preguntado quién se convirtió quién