Dear Soldier - Shawn James

Who am I to say what’s right or wrong?

But who are you to pull the trigger on their enemies?

Young man joined the front lines to still his stormy soul

Now all that’s left are the memories of old

They all fall down

Some won’t survive

Trying to escape

The memory of what they became

«I tried hard to be proud of my service, but all I could feel was shame.

Racism could no longer mask the reality of the occupation.

These were people,

these were human beings.

I feel guilt anytime I see a mother with her children,

like the one who cried hysterically, and screamed that we’re worse than Saddam,

as we forced her from her home.

I feel guilt anytime I see a young girl,

like the one I grabbed by the arm, and dragged into the street.

We were told we were fighting terrorists… the real terrorist was me,

and the real terrorism was this occupation.»

Who am I to say what’s right or wrong?

But who are you to pull the trigger on their enemies?

Young man joined the front lines to still his stormy soul

Now all that’s left are the memories of war

They all fall down

Some won’t survive

Trying to escape

The memory of what they became

They all fall down

Some won’t survive

Trying to escape

The memories of what they became

«While all those weapons are created and owned by this government,

they are harmless without people willing to use them.

Those who send us to war,

do not have to pull the trigger, or lob a mortar round;

they do not have to

fight the war, they merely have to sell the war.

They need a public who’s

willing to send their soldiers into harm’s way.

They need soldiers who are

willing to kill and be killed, without question.

Soldiers, sailors, marines,

airmen have nothing to gain from this occupation.

The vast majority of people

living in the U.S. have nothing to gain from this occupation.

In fact,

not only do we have nothing to gain but we suffer more because of it.

We lose limbs, endure trauma and give our lives.

Our families have to watch

flag-draped coffins lowered into the earth.»

¿Quién soy yo para decir lo que está bien o mal?

Pero, ¿quién eres tú para apretar el gatillo contra sus enemigos?

Joven se unió al frente para calmar su alma tormentosa

Ahora todo lo que queda son los recuerdos de antaño

todos se caen

Algunos no sobrevivirán

Intentando escapar

El recuerdo de lo que se convirtieron

«Me esforcé por estar orgulloso de mi servicio, pero todo lo que podía sentir era vergüenza.

El racismo ya no podía enmascarar la realidad de la ocupación.

Estas eran personas,

estos eran seres humanos.

Siento culpa cada vez que veo a una madre con sus hijos,

como el que lloraba histéricamente y gritaba que somos peores que Saddam,

como la obligamos a salir de su casa.

Me siento culpable cada vez que veo a una niña,

como el que agarré por el brazo y arrastré a la calle.

Nos dijeron que estábamos luchando contra terroristas... el verdadero terrorista era yo,

y el verdadero terrorismo fue esta ocupación.»

¿Quién soy yo para decir lo que está bien o mal?

Pero, ¿quién eres tú para apretar el gatillo contra sus enemigos?

Joven se unió al frente para calmar su alma tormentosa

Ahora todo lo que queda son los recuerdos de la guerra

todos se caen

Algunos no sobrevivirán

Intentando escapar

El recuerdo de lo que se convirtieron

todos se caen

Algunos no sobrevivirán

Intentando escapar

Los recuerdos de lo que se convirtieron

«Si bien todas esas armas son creadas y propiedad de este gobierno,

son inofensivos sin gente dispuesta a usarlos.

Los que nos envían a la guerra,

no tiene que apretar el gatillo o lanzar una ronda de mortero;

no tienen que

pelear la guerra, simplemente tienen que vender la guerra.

Necesitan un público que esté

dispuestos a enviar a sus soldados al peligro.

Necesitan soldados que estén

dispuesto a matar y ser asesinado, sin dudarlo.

Soldados, marineros, infantes de marina,

los aviadores no tienen nada que ganar con esta ocupación.

La gran mayoría de las personas

que viven en los EE. UU. no tienen nada que ganar con esta ocupación.

De hecho,

no solo no tenemos nada que ganar, sino que sufrimos más a causa de ello.

Perdemos extremidades, sufrimos traumas y damos nuestras vidas.

Nuestras familias tienen que ver

ataúdes cubiertos con banderas hundidos en la tierra.»