A continuación la letra de la canción Griechischer Wein Artista: Oktoberfest Con traducción
Texto original con traducción
Oktoberfest
Es war schon dunkel, als ich durch Vorstadtstraßen heimwärts ging.
Da war ein Wirtshaus, aus dem das Licht noch auf den Gehsteig schien.
Ich hatte Zeit und mir war kalt, drum trat ich ein.
Da saßen Männer mit braunen Augen und mit schwarzem Haar,
und aus der Jukebox erklang Musik, die fremd und südlich war.
Als man mich sah, stand einer auf und lud mich ein.
Griechischer Wein ist so wie das Blut der Erde.
Komm', schenk dir ein
und wenn ich dann traurig werde,
liegt es daran, dass ich immer träume von daheim;
Du musst verzeih’n.
Griechischer Wein, und die altvertrauten Lieder.
Schenk' noch mal ein!
Denn ich fühl' die Sehnsucht wieder;
in dieser Stadt werd' ich immer nur ein Fremder sein,
und allein.
Und dann erzählten sie mir von grünen Hügeln, Meer und Wind,
von alten Häusern und jungen Frauen, die alleine sind,
und von dem Kind, das seinen Vater noch nie sah.
Sie sagten sich immer wieder: Irgendwann kommt er zurück.
Und das Ersparte genügt zu Hause für ein kleines Glück.
Und bald denkt keiner mehr daran, wie es hier war.
Griechischer Wein ist so wie das Blut der Erde.
Komm', schenk dir ein
und wenn ich dann traurig werde,
liegt es daran, dass ich immer träume von daheim;
Du musst verzeih’n.
Griechischer Wein, und die altvertrauten Lieder.
Schenk' noch mal ein!
Denn ich fühl' die Sehnsucht wieder:
in dieser Stadt werd' ich immer nur ein Fremder sein,
und allein.
Ya estaba oscuro cuando caminé a casa por las calles suburbanas.
Había una posada de la que aún brillaba la luz sobre la acera.
Tenía tiempo y tenía frío, así que entré.
Allí estaban sentados hombres con ojos marrones y cabello negro,
y la máquina de discos tocaba música extranjera y sureña.
Cuando me vieron, alguien se levantó y me invitó.
El vino griego es como la sangre de la tierra.
Ven a servirte
y cuando me pongo triste
¿Es porque siempre sueño con el hogar;
Tienes que perdonar.
Vino griego y las canciones familiares.
¡Dale de nuevo!
Porque vuelvo a sentir el anhelo;
en esta ciudad siempre seré un extraño
y solo.
Y luego me hablaron de verdes colinas, mar y viento,
De casas viejas y mujeres jóvenes que están solas
y del niño que nunca vio a su padre.
Se decían a sí mismos: algún día volverá.
Y lo que ahorras es suficiente para un poco de felicidad en casa.
Y pronto nadie recuerda cómo era aquí.
El vino griego es como la sangre de la tierra.
Ven a servirte
y cuando me pongo triste
¿Es porque siempre sueño con el hogar;
Tienes que perdonar.
Vino griego y las canciones familiares.
¡Dale de nuevo!
Porque vuelvo a sentir la añoranza:
en esta ciudad siempre seré un extraño
y solo.
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