Me, Museum - Mary Lambert

My mother found a rabid dog

And wanted to hug it

Wanted to give it all her glorious honey love

Wanted to bathe her children in a two-parent household

But, the dog didn’t want kids

The dog would scream it in the hallway at four A. M

Reminding us as often as possible

The sheer art of it

How the monster could panic into my body

Sometimes I still hear it in the chambers of my heart

The way some glorious paintings stay with you

I am a museum

I must be a museum

When I was seven, the dog told me I was going to be a slut

No one came over to our house to play

The dog made me write, «I will flush the toilet seventy-five times»

I would’ve remembered to flush the toilet

But, I started blacking out around then

Forgetting basic things

Started praying that Oprah would save us all

I took snapshots with my memory camera

Hoping there would be justice for this kind of «psyco-warfare»

The teachers at the daycare offered apology eyes and extra sequence

For the art project

The day after, the dog chased me around each room

Because I forgot where my other shoe was

When you are a child

And your mind is panicked like a fire alarm at all time

You lose the ability to remember simple things

I haven’t lost a personal item in months

Do not laugh when I say, 'This is a victory'

Shame is an ocean I swim across

Sometimes, I call it drowning

Sometimes, I call it Moses

Sometimes, I say, «Good morning!»

and swade through its murky surge

Sometimes, I win and cut off its crest with a pink machete

Sometimes, I want to fuck it and

Marry it and kill it all at the same time

Sometimes, I spend my whole day apologizing on shame’s behalf

Sometimes, I think it must be an art form to feel this bad

Sometimes, I outrun all of its psyco-history

Other times, I repeat the language from my child mouth

While beating my head against a wall

But all the time I am forgiven

Mi madre encontró un perro rabioso

Y quería abrazarlo

Quería darle todo su glorioso amor de miel

Quería bañar a sus hijos en un hogar con dos padres

Pero, el perro no quería niños.

El perro lo gritaba en el pasillo a las cuatro de la mañana.

Recordándonos tan a menudo como sea posible

El puro arte de ello

Cómo el monstruo podría entrar en pánico en mi cuerpo

A veces todavía lo escucho en las cámaras de mi corazón

La forma en que algunas pinturas gloriosas se quedan contigo

soy un museo

Debo ser un museo

Cuando tenía siete años, el perro me dijo que iba a ser una puta

Nadie vino a nuestra casa a jugar.

El perro me hizo escribir: «Voy a tirar de la cadena setenta y cinco veces»

Me habría acordado de tirar de la cadena del inodoro

Pero, comencé a desmayarme en ese momento.

Olvidar cosas básicas

Empezó a rezar para que Oprah nos salvara a todos.

Tomé instantáneas con mi cámara de memoria

Esperando que haya justicia para este tipo de «psico-guerra»

Los maestros de la guardería ofrecieron ojos de disculpa y secuencia adicional.

Para el proyecto de arte

Al día siguiente, el perro me persiguió por todas las habitaciones.

Porque olvidé dónde estaba mi otro zapato

Cuando eres un niño

Y tu mente está en pánico como una alarma de incendio en todo momento

Pierdes la capacidad de recordar cosas simples.

No he perdido un artículo personal en meses

No te rías cuando digo, 'Esto es una victoria'

La vergüenza es un océano en el que nado

A veces, lo llamo ahogamiento

A veces, lo llamo Moisés

A veces, digo, «¡Buenos días!»

y zambullirse a través de su oleaje turbio

A veces gano y le corto la cresta con un machete rosa

A veces, quiero follarlo y

Cásate con él y mátalo todo al mismo tiempo

A veces, paso todo el día disculpándome en nombre de la vergüenza.

A veces, creo que debe ser una forma de arte sentirse tan mal.

A veces, supero toda su psico-historia

Otras veces, repito el lenguaje de mi boca de niño

Mientras golpeo mi cabeza contra una pared

Pero todo el tiempo estoy perdonado