King Of The Burning Anthems - Darzamat

I am the still darkness of stars

I am the shadow of a flickering flame

I am the mournful moaning of wind

I am the sigh of a tomb of silence

I am the cold eternity of the sea

I am the blood-stained dagger of the hearts

Here I am, the bell that plagues the conscience

Overwhelmed by the pale abyss

Here I am, the gloomy temple of my soul

That will never let you forget

Here I am, frozen into a gem of wisdom

That petrifies with fear

Here I am, the anthem of shadow

That reverberates with a distant resonance

Here I am, the chariot running blindly to a certain death

As merciless as the grave

Here I am, the prophet of haunting infinity

That pervades from all sides

I am the bright flame amidst the gale

I illuminate mountain murk with the glow of dawn

I am the ember of my pain, the star of my power

I am the thunder of the storm louder than eternity

I am the dust of desert scratching bloodstained tombs

I am the abyss of volcanoes spouting venom

Soy la quieta oscuridad de las estrellas

Soy la sombra de una llama parpadeante

Soy el gemido lúgubre del viento

Soy el suspiro de una tumba de silencio

Soy la fria eternidad del mar

Soy el puñal ensangrentado de los corazones

Aquí estoy yo, la campana que azota la conciencia

Abrumado por el abismo pálido

Aquí estoy, el templo tenebroso de mi alma

Eso nunca te dejará olvidar

Aquí estoy, congelado en una joya de sabiduría

Que se petrifica de miedo

Aquí estoy, el himno de la sombra

Que reverbera con una resonancia distante

Aquí estoy, el carro corriendo a ciegas hacia una muerte segura

Tan despiadado como la tumba

Aquí estoy, el profeta del infinito inquietante

Que impregna por todos lados

Soy la llama brillante en medio del vendaval

Ilumino la oscuridad de la montaña con el resplandor del amanecer

Soy la brasa de mi dolor, la estrella de mi poder

Soy el trueno de la tormenta más fuerte que la eternidad

Soy el polvo del desierto arañando tumbas ensangrentadas

Soy el abismo de los volcanes escupiendo veneno