The House At The Top Of The World - Bob Geldof

I got off the 45A somewhere around the new estates which were

Advertised as being in Killarney but were really in just a field

And I was going to the house at the top of the world

Brian Carroll lived around here somewhere.

And after school

I’d sometimes go back to his place and sing with his brother

Dermot.

He knew all the Motown songs.

Sometimes I think about

Him and I heard that he’s a civil servant in Cork which is

Funny for a guy who used to sing Motown songs

Soon I’d come to the Leopardstown dual carriageway.

It was the

First motorway in Ireland and it was a 100 yards long.

I liked

The name.

I don’t remember a town being there and I never saw

No leopards.

But I had to cross it anyway to get to the house

At the top of the world

Everyone thought the dual carriageway was the great and modern and

Every Saturday the bowsies, yahoos, guttersnipes and corner boys

Would empty out of the pubs and scream like wild Saturday night

Leopards drunk and fast and delirious for that blessed 100 yards

People were always getting killed

Well I ducked and weaved and it was fun and I made it over and

Up the small road, past the Silver Tassie, along the river bank

Past the Proddie church and off left up the lane to the house

At the top of the world where you lived

Your mother in her sensible shoes and you father in his tea-cosy

Wooly hat, bright eyes and roomful of old hoarded yellowing

Newspapers and 1920's photos of the Burren and you busy in the

Kitchen half-glad to see me, half nervous with your parents around

You’d take me for a walk around the field and down the lane and

When the evening fell your father would light the peat fire and

Show me pictures of the West taken in the 20's and then he’d

Go to bed.

And the night was full of you and the evening and the

Peat fire in the house on the top of the world

And then it was time to go and risk death again in the dark of

The Leopardstown dual carriageway

And on the way back I felt I could just jump the whole bloody thing

Me bajé de la 45A en algún lugar alrededor de las nuevas urbanizaciones que estaban

Anunciados como si estuvieran en Killarney, pero en realidad solo estaban en un campo

Y yo iba a la casa en la cima del mundo

Brian Carroll vivía por aquí en alguna parte.

y despues de la escuela

A veces volvía a su casa y cantaba con su hermano.

Dermot.

Se sabía todas las canciones de Motown.

A veces pienso en

Él y yo escuchamos que es un funcionario en Cork, que es

Divertido para un tipo que solía cantar canciones de Motown

Pronto llegué a la carretera de dos carriles de Leopardstown.

Era el

Primera autopista en Irlanda y tenía 100 yardas de largo.

Me gustó

El nombre.

No recuerdo que haya un pueblo allí y nunca vi

Sin leopardos.

Pero tuve que cruzarlo de todos modos para llegar a la casa.

En la cima del mundo

Todos pensaban que la autovía era la gran y moderna y

Todos los sábados los bowsies, los yahoos, los canallas y los chicos de la esquina

Se vaciaría de los pubs y gritaría como un loco sábado por la noche

Leopardos borrachos y rápidos y delirantes por esos benditos 100 metros

La gente siempre estaba siendo asesinada

Bueno, me agaché y tejí y fue divertido y lo logré una y otra vez.

Subiendo por la pequeña carretera, pasando el Silver Tassie, a lo largo de la orilla del río

Pasó la iglesia de Proddie y giró a la izquierda por el camino hacia la casa.

En la cima del mundo donde vivías

Tu madre en sus zapatos sensibles y tu padre en su té acogedor

Sombrero de lana, ojos brillantes y habitación llena de amarillentos viejos atesorados.

Periódicos y fotos de 1920 del Burren y tú ocupados en el

Cocina medio contenta de verme, medio nerviosa con tus padres alrededor

Me llevarías a dar un paseo por el campo y por el camino y

Cuando caía la noche, tu padre encendía el fuego de turba y

Muéstrame fotos de Occidente tomadas en los años 20 y luego él

Ve a la cama.

Y la noche se llenó de ti y la tarde y el

Fuego de turba en la casa en la cima del mundo

Y luego llegó el momento de ir y arriesgarse a morir de nuevo en la oscuridad de

La autovía de Leopardstown

Y en el camino de regreso sentí que podía saltar todo el maldito asunto