The Serpent Shepherd - BEACONS

I’m bringing whole new meaning to the latest fashion statement.

She sulked in sin and now I wear her skin.

Nothing is wrong with this.

Nothing is wrong with me.

Come on baby, let me give your cold lips a kiss.

Let me give you a kiss.

Let me depart from your lips, let me give you a final kiss.

Oh how she used to hiss and ruin every man she met.

That filthy slither of a woman needed to be ruined epically.

Oh how her epic time came and with every incision I reminded her of their names

and she accepted all of the blame.

Not by choice but by cut.

Colossal death.

Never ending rest.

Un sleep with no peace.

Ripped apart piece by piece.

I remember why I was put here.

I’m not sure who but someone whispers in my ear.

The serpent shepard does not sleep but the shepard can see through those who

appear to be weak.

The voice inside my head shows me where you hide and then I follow your scales

upon the ground until the opportune time to strike you down.

The serpent shepherd does not sleep

Estoy trayendo un significado completamente nuevo a la última declaración de moda.

Ella se enfurruñó en el pecado y ahora me pongo su piel.

No hay nada malo con esto.

Nada está mal conmigo.

Vamos bebé, déjame darte un beso en tus fríos labios.

Déjame darte un beso.

Déjame partir de tus labios, déjame darte un último beso.

Oh, cómo solía silbar y arruinar a todos los hombres que conocía.

Ese sucio deslizamiento de mujer necesitaba ser arruinado épicamente.

Ay cómo llegó su momento épico y con cada incisión le recordaba sus nombres

y ella aceptó toda la culpa.

No por elección sino por corte.

Muerte colosal.

Descanso interminable.

Des-dormir sin paz.

Desgarrado pieza por pieza.

Recuerdo por qué me pusieron aquí.

No estoy seguro de quién, pero alguien me susurra al oído.

El pastor serpiente no duerme pero el pastor puede ver a través de aquellos que

parecen ser débiles.

La voz dentro de mi cabeza me muestra donde te escondes y luego sigo tus escalas

sobre el suelo hasta el momento oportuno para derribarte.

La serpiente pastora no duerme